martes, 4 de enero de 2011

Un pueblo olvidado por Dios - Parte 1

Escribiendo desde: Mi Casa, Manzanillo, Colima.

Sales de Colima y viajas por la carretera en dirección a Cuauhtémoc. En el tercer retorno das vuelta a la izquierda y tomas el camino que sube por las densas faldas del volcán de Colima. Pones tu CD favorito de La Oreja de Van Gogh (que, cabe mencionar, quemaste tú mismo) en el estéreo y afinas tu voz en modo de preparación para cantar las rolas que ya tienes grabadas con fuego en la mente, mientras disfrutas del hermoso paisaje rústico de los alrededores. Parece que siempre es primavera por estas zonas, aunque estemos en pleno invierno, los árboles todavía florecen y escuchas a los pájaros cantar en armonía. Claro, tampoco se te escapa una que otra ardilla juguetona, que por juguetona la terminaste atropellando accidentalmente, pero no hay pedo.
Te atreves a dormirte un rato, pues sabes que todavía hace falta un buen rato y como te sabes el recorrido de memoria ya sabes que no te vas a perder nada. Para cuando escuchas la melodía con la que inicia La Playa, tu canción favorita de todo el disco, abres los ojos. Sabes que están llegando a su destino. Miras a tu alrededor y notas cómo los árboles y los prados han desaparecido, y en su lugar se encuentran varias casas derrumbadas de concreto. Cierras los ojos, cuentas hasta cinco, y los vuelves a abrir. Ahí está el súper de Doña Pina, la hija de su chingada madre.
Mientras se termina tu canción preferida en la última tonada, ves que están pasando por el jardín del pueblo y que solo fatan dos cuadras para llegar a su destino. Sonríes cautelosamente, observas a tus compañeros, la mayoría de ellos dormidos, y apagas el estéreo. Quitas el disco y lo guardas en tu chamarra. Siempre es el mismo recorrido. Siempre es el mismo cuento. Y lo que siempre te lamentas es que nunca estás despierto para ver el letrero que lee: Bienvenidos a Montitlán, el pueblo olvidado por Dios.


Estoy muy alegre.
Antes de comenzar a escribir sobre Montitlán, uno de mis lugares favoritos en todo el mundo, tengo que hacer unos comentarios. Primero, estoy escribiendo al mismo tiempo que hago mis maletas. Segundo, me encanta Montitlán, a pesar de los viles comentarios que hago de ese pueblo. Tercero, hablé con Carlos sobre el "incidente" en la playa.
Resulta que el imbécil de Carlos  se había encabronado porque me la pasé platicando con Ángel mientras él simplemente nos veía con su carita de "estoy deprimido nadie me ama me quiero morir." Pinche inútil. Y sí, me dijo que lo había hecho por cizaña. Ahora, tendré que aceptar la cita que estoy seguro Ángel preparará en un futuro muy cercano (dentro de esta semana), y que volverá a concertar una cita en cuanto regrese a Guadalajara... aunque tal vez podría utilizarlo en mi beneficio si eso ocurre. Podría conseguir raite con él para irme a Guadalajara, jaja. Así no gastaría en boletos de autobús ni en taxi. Lo pensaré... pero por ahora no tengo que preocuparme por él, porque en caso de que me haya querido invitar a salir hoy, lo decepcionaré, por una simple razón:

¡MONTITLÁN!

Como comenté en la introducción, vas para Cuauhtémoc, te subes al volcán, te tiras por el precipicio, pasas cuatro infiernos y en el quinto das vuelta a la derecha, saludas a los que murieron sin haber sido bautizados y bajas seis niveles, te subes al culo del Diablo y finalmente... llegas a Montitlán, el pueblo olvidado de Dios.
"Pueblo Olvidado Por Dios," "El Pueblo Alejado de la Mano de Dios," "Dios Nos Odia," y "¡Arriba el Sherif!" son los eslogans favoritos del poblado de Montitlán, pero le puedes decir como quieras, nadie se agüita. Podría mentarles la madre a sus habitantes todo lo que quisiera, porque ahí no hay internet. ¡Ja!
Pero dicho todo eso, Montitlán es un lugar hermoso y maravilloso. Un lugar perfecto para rentar una casa y pasarte un fin de semana con tus amigos cercanos o con tus familiares. ¡Ah! Me encanta Montitlán. Aparte de que está fresco (lo cual es un lujo en el estado de Colima), es... acogedor. Y familiar. Claro, dicen que se aparece el diablo por las noches y que si andas solo en las calles oscuras se aparece un burro sin jinete... pero qué diablos. Montitlán es lo mejor del mundo. Cae dentro de mis Top 10 Pueblitos del mundo.
¿Sabes lo que Wikipedia dice de Montitlán?
Montitlán es una pequeña localidad en el municipio de CuauhtémocColimaMéxico. El poblado se encuentra en las estribaciones del costado sur del Volcán de Colima, ofreciendo extraordinarios paisajes a los pobladores. Ahí se organizan paseos y caminatas para ascender por las laderas del volcán. Hacia el sur del poblado es posible admirar amplias extensiones del Valle de Colima. Su población es de 148 habitantes y se encuentra a 1.440 metros de altitud.
Eso es todo. Pinche Wikipedia, siempre la checo y me trae un chingo de depresiones. ¿¡Cómo puede solo tener un párrafo sobre la maravilla que es Montitlán!
Claro, ya deberías de haberte dado cuenta de que lo que hablo no es solo algo teórico, sino por medio del conocimiento empírico he llegado a estas conclusiones. Ya van dos veces que voy a Montitlán con varios amigos (Los cuales se pueden dividir en dos grupos: Delta y El Clan Colimense.) para pasar una buena noche, pistear agusto, y chingarnos todo un garrafón de agualoca. Que cabe mencionar es una de mis bebidas alcohólicas favoritas, y una de las que mejor preparo.
Tecontaré cómo estuvo que terminé lléndome a este pueblo tan rápido entrando al año: Ayer me habló Jet, uno de los miembros de Delta, un grupo de amigos de Colima, y me comentó que hoy estaba planeado un viaje a Montitlán por una noche. Como yo tengo un historial intacto en lo que respecta viajes a Montitlán (2 de 2, no puedo faltar la tercera), me decidí a venirme. Creí que le tendría que suplicar a mis padres para que me dieran permiso, pero fue tan fácil que resultó deprimente.
Ahora tengo que ver a Jet en su casa en Colima a las 11:00 a.m. y mi camión sale a las 9:00 a.m., dentro de media hora. Eso significa que tengo una hora para cambiarme y terminar de hacer mi maleta, así como escribir esta entrada para no dejarte con un blog abandonado por dos días sin previo aviso, cambiarme, bañarme, conseguir taxi en la parte del boulevard donde no pasan taxis y llegar a la central a las 8:30 a.m. (aunque calculo que voy a terminar llegando a la central a las 8:50 a.m. porque ya se hicieron las diez para las nueve), comprar boleto, subirme al camión y dormir. Y para esto, se me va a olvidar mi shampoo o mi cepillo de dientes, o algún otro artículo de aseo personal.
Por lo menos te dejaré los temas que planeo abordar cuando regrese mañana para que la entrada no esté tan culera.

La Programación Futura es...
Mañana, 5 de Enero del 2011: Un pueblo olvidado por Dios - Parte 2
Descubre lo que sucedió en los dos viajes pasados a Montitlán. Dos historias entretenidas que te mantendrán al borde de tu asiento (porque también hay suspenso).
Sábado, 7 de Enero del 2011: Un pueblo olvidado por Dios - Parte 3
Descubre lo que sucedió en el último viaje a Montitlán de Lefish. Reseña con todo y perturbadoras imágenes mentales. Y te aseguro que traeré algun cuento medio tenebroso.

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